– La calibración acreditada permite la emisión de un CERTIFICADO DE CALIBRACIÓN, un documento oficial reconocido por las organizaciones y organismos metrológicos internacionales más autorizados (EA – IAF – ILAC).
Este certificado solo puede ser emitido por un laboratorio acreditado, es decir, supervisado directamente por Accredia (organismo de acreditación italiano) o por un organismo extranjero equivalente.
Este organismo verifica:

  • Los procedimientos y el método de trabajo
  • Los instrumentos
  • La formación de los operadores

Estos controles garantizan la competencia del laboratorio y la fiabilidad de las calibraciones, pero también implican mayores costes.

– La calibración no acreditada permite disponer de un INFORME DE CALIBRACIÓN, emitido por un laboratorio que no está obligado a someterse a ningún tipo de control.
De hecho, cualquier persona puede realizar calibraciones no acreditadas siempre que se utilicen muestras certificadas (celdas de carga, pesos, etc., con certificado).
Las calibraciones no acreditadas pueden ser igual de escrupulosas y fiables, pero se debe confiar únicamente en la profesionalidad del laboratorio y en las eventuales comprobaciones realizadas por el cliente.
En otras palabras, encontramos dos grandes diferencias:

  1. el certificado de calibración es un documento reconocido a nivel internacional
  2. un laboratorio acreditado ofrece una garantía de fiabilidad